La colección “Lágrimas de Midas” emerge como una profunda reflexión sobre la relación entre la avaricia humana y la devastación del entorno natural, representada a través de la riqueza y diversidad de las especies nativas colombianas en peligro de extinción. Inspirada en el mito del rey Midas, cuya insaciable codicia por el oro resultó en su maldición, esta serie de obras busca cuestionar y confrontar la misma codicia que hoy amenaza nuestra biodiversidad.

Colombia, un país con una riqueza biológica inigualable y una histórica conexión con el oro, sirve como telón de fondo para esta narrativa. Desde las piezas precolombinas saqueadas hasta los mitos de Eldorado, el oro ha sido símbolo tanto de esplendor como de explotación. “Lágrimas de Midas” destaca cómo la avaricia contemporánea, similar a la del rey Midas, ha llevado a la explotación y destrucción de nuestro valioso capital natural y cultural.

Las obras de esta colección están meticulosamente elaboradas con laminilla dorada, creando retratos resplandecientes de especies emblemáticas en peligro de extinción, como la tingua, el jaguar, la orquídea, las ranas doradas y el frailejón. La elección del oro como medio artístico no es casual; presenta tanto la belleza deslumbrante como la trágica avaricia que amenaza estos tesoros naturales.

Cada dibujo fusiona los retratos de estos seres vivos con pictogramas precolombinos, creando un vínculo visual y conceptual entre el patrimonio cultural y natural de Colombia. Los pictogramas no solo adornan, sino que cuentan historias de una era en la que la naturaleza y el oro coexistían en armonía, en contraste con la explotación moderna que despoja ambos.